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Se trata de un cometa verde con anticola. En estos días se puede ser testigo de este peculiar evento astronómico, aunque es mejor con la ayuda de un telescopio o de binoculares y lejos de la contaminación lumínica de las ciudades.
Los secretos del cometa verde que tiene más de 50.000 años sin visitarnos
Hace 50.000 años fue la última vez que se le vio a este cometa verde desde nuestro planeta. En aquel entonce, los neandertales aún vivían en Europa. El astro luce un verde vistoso y tiene una anticola. Y también, casi puede ser visto a simple vista, sin el uso de ningún instrumento.
Todas esas características hacen del denominado “cometa verde” un acontecimiento curioso que va un poco más allá del pequeño mundo de los aficionados a la astronomía.
Javier Armentia, astrofísico y director del Planetario de Pamplona (España), reconoció que este acontecimiento es todo un “hype” (excesivo bombo), porque en la actualidad todo lo es, aunque lo cierto es que fascina.
El experto resumió diciendo que, no todos los cometas presentan esa “anticola”, o más bien, por lo general no llega a ser observable ese fenómeno de que el material que se va del astro quede iluminado. Y además, el color verde, no siendo tampoco inusitado, llama mucho la atención.
Este cometa verde fue descubierto en marzo del año pasado, ha pasado menos de un año, por la Instalación Transitoria Zwicky (EEUU), ZTF por sus siglas en inglés; de donde proviene su nombre científico real, que es C/2022 E3 (ZTF).
¿Por qué es un cometa verde y qué es eso de la anticola?
No se trata de la primera vez que un cometa de este color es visible desde nuestro planeta, como el que fue captado por la NASA en febrero de 2009. El color verde se produce solo en la envoltura de la cabeza del astro, denominada coma, como un aura turquesa, causada por la reacción de la luz ultravioleta y un gas carbónico que sale del cometa, como fue descrito en el estudio de 2021 “Fotodisociación del dicarbono: cómo la naturaleza rompe un enlace múltiple inusual“, que trataba de explicar el fenómeno.
Hablemos de la anticola. A pesar de que tampoco es el primero en lucir una de estas, además tiene la peculiaridad de contar con una anticola. Por ejemplo, en el año 1997 el recordado “Hale–Bopp” también lucía la suya a su paso por la Tierra.
El portal “Space Weather” explica que, las colas gemelas de un cometa con frecuencia son visibles con bastante claridad, debido a que la estela de polvo refleja la luz del Sol, y el gas dentro de la otra cola se ioniza, generando un tenue brillo. Sin embargo, la anticola aparece en dirección contraria a lo esperado; es decir, se trata de una ilusión óptica que se ve cuando nuestro planeta cruza el plano orbital de un cometa. Es en ese instante que el borde de la cola de polvo en forma de abanico del astro parece una punta que indica hacia el Sol.
¿Será verdad que lo vamos a poder ver a simple vista?
Tal vez se podrá ver un poquito sin instrumentos, dependerá del lugar y de la contaminación lumínica. Aunque si estamos paseando por un centro urbano y solo miramos al cielo nocturno y ya, sin más, es improbable que logremos ver al cometa verde.
Lo mejor sería, como es costumbre, alejarse de la contaminación lumínica, y ubicarnos en zonas rurales preferiblemente. Armentia advirtió que, este cometa verde es pequeñito, y a pesar de que la gente está intentando convencer de que se puede ver a simple vista, sin telescopio o binoculares no hay forma de poder verlo. Por otro lado, la Luna está en cuarto creciente y en estos días próximos habrá más luz y menos contraste en el cielo nocturno, agregó el especialista.
Su recorrido por el cielo
El astrofísico Josep Maria Trigo en el sitio “The Conversation”, señaló que, el C/2022 E3 (ZTF), el 30 de enero pasará próximo a la estrella Polar y el 6 de febrero pasará cerca de la brillante Capella. Moviéndose con una velocidad angular muy rápida durante los días de mayor cercanía a nuestro planeta.
Por su parte, la NASA nos recuerda que este cometa debería poderse ver con un telescopio y posiblemente con binoculares, los observadores localizados en el hemisferio norte hallarán el cometa verde en el cielo más temprano, antes de la llegada del amanece, mientras se mueve muy rápido hacia el noroeste durante el mes de enero. Para el hemisferio sur, el astro se hará visible a principios de febrero. La semana que viene será el momento ideal para observar al cometa verde.
La NASA también dice que, no se espera que este cometa se convierta en el espectáculo que fue el cometa Neowise en el año 2020, aunque continúa siendo una excelente oportunidad para establecer una conexión personal con un visitante helado venido del lejano sistema solar exterior.
¿Qué tanto se acerca a la Tierra? El primero de febrero será el día en que más se acercará este cometa verde a nuestro planeta. El astro alcanzó su perihelio el 12 de enero, a una distancia de 166 millones de kilómetros. Mientras que su máximo acercamiento con nosotros será el día primero de febrero, cuando estará a una distancia de tan solo 42 millones de kilómetros de la Tierra.