De acuerdo con los astrónomos Amir Siraj y Abraham Loeb de la universidad de Harvard, el tiempo que tardaría una civilización extraterrestre en responder algún llamado de la Tierra sería de 3 milenios.
Para estimar dicho tiempo, los expertos se basaron en el Principio de Copérnico, el cual establece que la humanidad y la Tierra son representativas de la norma, más no un valor atípico.
Cabe recalcar que, Amir Siraj y Abraham Loeb han abordado su teoría en un estudio publicado en arXiv, lo que significa que, hasta el momento no ha sido revisado ni publicado por una revista científica.
Hipótesis de los astrónomos
En el desarrollo de su estudio, los investigadores asumieron que las inteligencias extraterrestres estarían interesadas en enviar un mensaje al planeta Tierra como respuesta a la detección de actividad tecnológica en nuestra sociedad.
Sin embargo, ante esta hipótesis surge una interrogante y es que de ser esto posible; ¿la humanidad sería capaz de escuchar el mensaje de una civilización de otro mundo antes de que la nuestra deje de existir?
En este sentido, el experto Siraj expresó que, “se considera importante el hecho de estimar el tiempo de respuesta de los cuerpos extraterrestres; puesto que tal estimación informa la naturaleza de búsquedas efectivas del Instituto de Búsqueda de Inteligencia Extraterrestre (SETI); así como también las implicaciones de señales confirmada, si es que alguna vez se recibe una”.
No obstante, la pregunta que él y su compañero Abraham Loeb tratan de responder en su artículo es, ¿cuánto tiempo podemos esperar para dar lugar a nuestra primera conversación cósmica? Así lo señaló Siraj durante su participación en Universe Today.
Como primer parámetro de su estudio, los astrónomos establecieron: la cantidad de tiempo que la humanidad ha estado emitiendo firmas detectables. Siendo de todas estas posibles firmas tecnológicas que se han considerado hasta el momento, las transmisiones de radio, las más probables e investigadas por el SETI.
Según el principio de Copérnico, se pudiera llegar a asumir que las entidades extraterrestres también se encuentran interesadas en la búsqueda de signos de inteligencia distintos a los suyos. Así lo creen los autores del estudio.
Explicación sobre el principio copernicano
De acuerdo a lo explicado por el astrónomo Abraham Loeb, “el principio copernicano establece que, es poco probable que vivamos en un momento privilegiado; así que la probabilidad de que otro planeta habitable pase ahora mismo por un semejante de nuestro primer siglo de comunicaciones por radio; considerando unos miles de millones de años de su historia, está muy por debajo de una parte en diez millones”.
Teniendo esto en mente, se estima una respuesta únicamente dentro de un espacio, lo suficientemente grande como para contener más de 10 millones de estrellas. Agregó Loeb. Asimismo, se puede suponer que una civilización avanzada extraterrestre podría ver las señales de radio como una posible firma tecnológica, escuchándolas de manera activa.
Recordemos que, la primera transmisión de radio de largo alcance se llevó a cabo en el año 1901; cuando el inventor italiano Guglielmo Marconi, lanzó la primera transmisión transatlántica de Cornualles, Inglaterra, a St. John’s, Terranova. Y desde ese entonces, las personas han estado enviando transmisiones de radio al espacio sin siquiera pensar en las consecuencias. Esto quiere decir que, si existe una civilización a 100 años luz de nuestro planeta, con radiotelescopios sensibles; cabe la posibilidad de que ya nos hayan escuchado.
De ser así, esto en teoría podría significar que ya hayamos “iniciado una conversación” con una entidad inteligente y estemos a la espera de una respuesta.
Consideraciones de los astrónomos
Los expertos estiman que los entes extraterrestres pueden comunicarse por medio de la radiación electromagnética, la cual se ubica en planetas similares a la Tierra que orbitan estrellas parecidas al Sol.
De igual manera, los astrónomos hacen uso del principio copernicano; el cual es inherentemente optimista sobre la prevalencia de la vida en el Universo; para el establecimiento de un límite inferior en el tiempo de respuesta esperado.
Por otro lado, las llamadas tecnologías de transmisión, tienen la posibilidad de extenderse más allá de las ondas de radio, con el objetivo de incluir otros tipos de radiación electromagnética; como, por ejemplo, los rayos gamma, láseres de microondas y rayos X. Puesto que la única limitante en este sentido es la velocidad de la luz, que sigue siendo la opción más rápida disponible.
Esto también implicaría el hecho de que, los humanos solo tendrían que esperar hasta el siglo 22 aproximadamente para recibir una transmisión de una civilización de otro mundo ubicada a una distancia de 100 años luz.
Lo cual seria posible, en el supuesto caso de que, la Vía Láctea sea relativamente homogénea en cuanto a la distribución de las estrellas ubicadas en su disco. De ser así, esto daría como resultado un volumen de mil millones de años luz cúbicos; que a su vez implicaría un tiempo de viaje de ida y vuelta de más de dos mil años.
En otras palabras, esto significa que, si una civilización extraterrestre sabe de nuestra existencia y desea hablar; no podríamos tener noticias de ellos hasta el año 4.000 de la presente era.