Este avance es considerado en la Sociedad Española de Neurología como una “una auténtica revolución”. Se trata de un fármaco capaz de reducir en un 27 % el deterioro cognitivo en pacientes que estén en fases iniciales de alzhéimer.
Una auténtica revolución para España, uno de los países con más enfermos de alzhéimer en todo el mundo
Hasta los momentos el tratamiento que existía para esta enfermedad era solo de carácter paliativo. Sin embargo, recientemente salió a la luz una medicación que ha logrado reducir un 27 % el deterioro cognitivo en las personas que padecen alzhéimer en fases iniciales.
El Dr. Juan Fortea, quien es coordinador del Grupo de Estudio de Conducta y Demencias de la Sociedad Española de Neurología; señaló que se trata de un estudio mastodóntico que se ha llevado a cabo en muchos países y en una gran cantidad de unidades de memoria del máximo nivel.
Fortea calificó el fármaco de “una auténtica revolución”. Y agregó que esta patología era una enfermedad que parecía prácticamente invencible y ahora, por primera vez, con un medicamento, se podrá modificar la trayectoria del alzhéimer. No se trata de una cura, pero es el inicio del camino. Aunque con este fármaco se consigue ralentizar la enfermedad notablemente, dijo el experto.
La denominada “cascada de amiloide”
Hay varias hipótesis acerca de las causas que provocan la enfermedad de Alzhéimer y este hallazgo vendría a verificar una de ellas, la denominada “cascada de amiloide”. Por esta razón la Sociedad Española de Neurología considera al nuevo fármaco como una auténtica revolución para el tratamiento del alzhéimer.
Fortea explicó que, hasta los momentos se habían acumulado muchos fracasos investigando esta hipótesis, de tal manera que había mucho escepticismo. Se trata de la primera vez que se ha visto que eliminar el amiloide produce un efecto clínico.
En su explicación el Dr. Fortea dijo que, el amiloide es una proteína que se va acumulando en el cerebro, y va formado algo como una pared de ladrillos y este nuevo fármaco es un anticuerpo monoclonal que se une a las placas de esta proteína para que las células blancas se las “coman”.
Este fármaco no se encuentra exento de efectos secundarios, puede provocar edema cerebral y en algunos pacientes provocar incluso sangrados cerebrales. El científico señaló que, la mayor parte de las veces estos sangrados son de poca intensidad y se pueden manejar bien, aunque existen, y eso es un riesgo.
Por lo cual los pacientes que estén bajo este tratamiento tienen que realizarse resonancias magnéticas cerebrales cada tantos meses, explicó el neurólogo.
Una progresión más lenta del alzhéimer
Al reducir la acumulación de amiloide se les permitirá a los pacientes una progresión más lenta de los síntomas del alzhéimer. La reducción de los síntomas fue calculada partiendo de una escala que evalúa cómo se desenvuelven las personas con la enfermedad en seis áreas. A saber, la memoria, resolución de problemas, orientación, actividades comunitarias, autocuidado y actividades en casa.
El experto también comentó que, este y otros tratamientos que van en la misma dirección y que van a salir en los próximos meses. Posiblemente van a llegar tarde para los pacientes que ya tienen una demencia. Debido a que el estudio se ha hecho en las fases iniciales de la patología y, también, estas inyecciones tardarán un par de años en estar disponibles.
El Dr. Fortea concluyó diciendo que, seguramente la esperanza de esta medicación es que sea más útil si es administrada incluso antes, para prevenir el alzhéimer.
