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Un niño superdotado a menudo puede ser intimidado o condenado al ostracismo. El Dr. Grant Hilary Brenner es psiquiatra y miembro de la Asociación Estadounidense de Psiquiatría. Este experto escribió un artículo recogido en “Journal of Psychology”, en el que analizaba la imagen de un genio.
Superdotado incomprendido
«Las personas superdotadas que son incomprendidas se enfrentan a luchas cuesta arriba y, a menudo, se encuentran más tarde en la vida, aunque trabajar cada vez más con niños ‘especialmente dotados’ crea un espacio para que jueguen tradicionalmente y les vaya bien antes en el entorno educativo«, dijo el doctor Brenner.
«Los niños superdotados a menudo son estigmatizados, etiquetados como extraños o antisociales y más propensos a ser intimidados o condenados al ostracismo«, explicó el psiquiatra.
«Debido a que se sabe tan poco sobre la superdotación, el entorno educativo, social y profesional no proporciona un hogar para los superdotados, lo que genera problemas sociales. A diferencia de aquellos con diferencias de aprendizajes tradicionales, puede ser difícil ver dónde los talentos pueden presentar desafíos cuando hay tantos aspectos positivos”, dijo el especialista.
Tendencias de un superdotado
Un experto explicó que, de acuerdo con el Instituto Davidson, las personas superdotadas tienen las siguientes tendencias: comprensión rápida, comprensión intuitiva de los principios fundamentales, necesidad de precisión, tendencia a la complejidad, diversidad de intereses, altas expectativas y un sentido del humor excéntrico.
«A menudo tienen un ‘desarrollo asincrónico’, claramente por delante en algunas áreas y en la media o por detrás en otras. Es difícil ver dónde encajan, y el entorno educativo a menudo no está configurado para adaptarse a sus diferencias». Especialmente para los niños más pequeños, el conflicto entre la apariencia juvenil y las habilidades avanzadas hace que sea difícil de aceptar para algunos maestros«.
Si bien muchos factores contribuyen a la superdotación, incluidos diferentes clases de inteligencia, educación y factores genéticos; la personalidad es el área principal de interés. ¿Es la naturaleza de las personas superdotadas diferente de la de las personas no superdotadas? se preguntó Brenner.
Base de datos y análisis general
Brenner señaló que, en la revista “High Ability Studies” los investigadores Ogurlu y Özbey (2021) realizaron un metanálisis de la literatura sobre talento y personalidad, para ver dónde encajan los cinco grandes rasgos de personalidad: extraversión, apertura a la experiencia, escrupulosidad, amabilidad y neuroticismo.
Utilizaron múltiples bases de datos para encontrar artículos de investigación que cumplieran con criterios estrictos para su inclusión en el análisis general y redujeron 103 citas a un conjunto final de trece estudios de altísima calidad para su revisión. Identificaron 83 citas relacionadas con el talento, la edad y el género. Factores relacionados con personalidades se incluyeron en la muestra final de casi 8.000 personas, incluidas 3.244 personas superdotadas, agregó el médico.
Usando técnicas estadísticas sofisticadas, compararon las puntuaciones de personalidad entre los grupos de superdotados y no superdotados para ver qué rasgos de personalidad estaban significativamente asociados con el talento. No hubo una diferencia significativa. Sin embargo, la apertura a la experiencia estuvo más relacionada con el talento, con un efecto moderadamente fuerte.
¿Sensibles o inadaptados?
Brenner dijo además que, encontraron que otros factores como la edad, el género, la muestra de estudio individual y la ubicación geográfica no explicaban el talento o la relación entre apertura y talento. Y que, la apertura a la experiencia es un componente importante de la inteligencia que promueve la creatividad y perspectivas y la capacidad de considerar múltiples opciones para el abordaje de la vida, comprender situaciones complejas y resolver problemas.
La apertura es consistente con la sensibilidad observada de las personas dotadas a la complejidad y las tendencias divergentes y la habilidad inusual y a veces sorprendente de las personas superdotadas para hallar y ver cosas que otros nunca notarían o incluso imaginarían. Por no hablar de un sentido del humor excéntrico, que puede ser un arma de doble filo, explicó el científico.
Y agregó que, otra implicación importante de este estudio es que, si bien las personas superdotadas a veces son estereotipadas por tener personalidades inadaptadas o incómodas; los rasgos sociales más pequeños, que incluyen una menor amabilidad y una menor extroversión, además de un mayor neuroticismo, no tienen nada que ver con la superdotación.
Curiosamente, la escrupulosidad no se relacionó con el talento, aunque sí se relacionó de forma independiente con el desempeño en el trabajo y en los estudios. La superdotación no garantiza el éxito, pero puede ayudar si se maneja bien, dijo el médico.