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El nuevo parque eólico marino Kriegers Flak, es el más grande de Dinamarca e incluso de Escandinavia. Las características más resaltantes del proyecto son sus 72 turbinas marinas; además de poseer al año una capacidad de consumo eléctrico de aproximadamente 600.000 hogares daneses.
El príncipe heredero de Dinamarca, Federico, realizó el lunes pasado la inauguración del parque eólico junto a Simon Kollerup, Ministro de Comercio e Industria del país. Kriegers Flak, se extiende 132 kilómetros cuadrados en la superficie del mar; incrementando la energía eólica danesa alrededor de un 16 % y marcando una gran pauta en el norte de Europa.
La compañía Vattenfall fue la encargada de la construcción del parque y a través de una publicación dio a conocer todos los detalles presentados durante el evento. En su discurso, proyectan esta inauguración como un progreso hacia el objetivo principal; lograr cumplir con la posibilidad de una vida sin combustibles fósiles en las futuras generaciones.
Este parque ofrece una fuerte alternativa en aporte a una transición verde, suministrando la electricidad que la sociedad necesita de una forma libre de fósiles; sin poner en peligro la salud del planeta, expresa Anna Borg, actual directora ejecutiva de la compañía Vattenfall.
La empresa indica que, el parque Kriegers Flak se localiza en el Mar Báltico, la distancia con respecto a la costa danesa es de 15 a 40 kilómetros y es el parque eólico marino más reciente y con mayores dimensiones de Vattenfall funcionando hasta el momento.
La proyección del parque eólico marino como fuente de energía
En el mes de mayo del año pasado, se procedió a instalar la primera cimentación del proyecto Kriegers Flak, posteriormente a principios del año 2021; se estableció el aerogenerador número uno y en el transcurso de los meses consiguieron finalizar efectivamente un total de 72 aerogeneradores puestos en servicio de manera continua.
Aun cuando el mundo se vio afectado drásticamente por la pandemia, el trabajo de construcción logró resultar exitoso y hasta con un adelanto en la planificación del mismo; mostrando resultados satisfactorios para el país. Las energías renovables aseguran la obtención de energía de fuentes naturales inagotables y garantizando que puedan conseguirse de manera indefinida.
La empresa Vattenfall mediante este proyecto destaca su posición como el principal proveedor de energía eólica marina encontrado en Dinamarca; puesto que logra cubrir más de 50 % de la capacidad instalada. El punto de atención del parque Kriegers Flak está ubicado en la isla de Mon, específicamente en el puerto de Klintholm.
Cada uno de los aerogeneradores, poseen una altura total de 188 metros y su capacidad de producción es de 604 MW. Dinamarca ha inclinado su consumo energético a fuentes de energía limpias; dando como resultado que casi un 30 % del consumo del país proceda de fuentes de energías renovables; utilizando cada vez más los biocombustibles.
Aprovechando los ambientes marinos del planeta
Al igual que la energía eólica terrestre, la energía eólica marina aprovecha la fuerza producida por el viento. La ubicación de los aerogeneradores es lo que hace la diferencia entre estos dos términos; como su nombre lo indica, una se localiza en la superficie terrestre y la otra en la superficie marina.
La energía eólica marina saca partido de las zonas que no son habitadas por seres humanos, dando a la población mayores posibilidades de encontrar en la superficie terrestre un sitio donde poder establecerse; todo esto por supuesto lejos de rutas marinas y de ambientes naturales de interés.
Los molinos eólicos sacan ventaja de las zonas ubicadas lejos de la costa, en presencia de vientos con velocidades mayores y mucho más constantes, gracias a la falta de barreras naturales; aquellas que podemos encontrar en tierra firme.
Dinamarca aspira una forma de vida más limpia
El país nórdico ha adoptado por ser pionero en energías limpias, más de dos tercios de la energía renovable proviene de la llamada bioenergía. Esta la podemos encontrar almacenada en materia orgánica o tratamiento de biomasa vegetal; se caracterizan por ser mucho menos contaminantes que los combustibles de origen fósil.
El negocio de la agricultura en Dinamarca provee indirectamente de la energía necesaria para aportar a la causa verde. Los desechos como el estiércol y las grasas de animales, son utilizados como materia base para los biocombustibles líquidos.
Muchos hogares daneses también hacen uso de redes de calefacción, el calor es distribuido por tuberías a los ciudadanos por medio de agua caliente. Este suministro utiliza compuestos de biomasa y algunas otras fuentes de energía que ayudan a la conservación del planeta.
La energía eólica forma parte de esta promesa, actualmente estos proyectos generan en conjunto con las que se obtienen con la bioenergía, la solar y la geotérmica; energías limpias que buscan recuperar y transformar los daños hechos por las actividades que amenazan la vida del planeta, aquellas que se seguirán aplicando por lo menos en un futuro cercano; pero esperan puedan cambiar.