Estudios recientes revelan que la cafeína tiene efectos en la estructura cerebral de las personas.
La cafeína es una sustancia que se encuentra en más de 60 plantas, principalmente en granos de café y hojas de té. Por lo que, siendo los países de mayor población, como China, India y Reino Unido, los que más consumen cotidianamente estas bebidas. Podemos concluir que es una de las sustancias que más se consumen en el planeta.
Que es la cafeina
Esta sustancia también es una droga. La cafeína es un alcaloide del grupo de las Xantinas, estimulante de sistema nervioso central, que afecta el nivel de alerta (por lo general aumentándolo). Y además producen una alteración del sueño cuando se consume en exceso, especialmente por la noche.
Esta referencia atrajo la atención de un equipo de investigadores del hospital psiquiátrico de la Universidad de Basilea en Suiza; conformado por los catedráticos Carolin Reichert y Christian Cajochen.
Descubrimiento sobre la cafeína y sus efectos en la estructura cerebral
El estudio publicado en la revista científica “Cerebral Cortex”, consiste en demostrar el efecto que produce la cafeína en el sistema nervioso central del ser humano; especialmente en la estructura cerebral, constituida por una capa externa o materia gris, que constituye la mayor parte de la corteza cerebral.
En este estudio participaron 20 jóvenes en buenas condiciones de salud, todos consumidores habituales de café. En el procedimiento utilizado se les suministro pastillas con cafeína como única fuente de la droga; así como la utilización de placebos, durante dos períodos de 10 días cada uno.
Contrario a lo esperado la cafeína no afecto el sueño de las personas participantes en el experimento, pero se pudieron observar apreciables cambios en el volumen de la sustancia gris cerebral. Lo cual fue determinado mediante escaneos cerebrales.
Conclusiones del estudio sobre la cafeína y sus efectos en la estructura cerebral
Al analizar el “efecto placebo”, es decir; la “abstinencia de cafeína” el volumen de la materia gris fue mayor al del período en el cual se suministraron las cápsulas de cafeína.
Del Estudio se deduce que, si bien el consumo de cafeína afecta el volumen de la sustancia gris cerebral; la abstinencia de café en solo 10 días representó una regeneración significativa en los individuos participantes.
“Nuestros resultados no significan necesariamente que el consumo de cafeína tenga un impacto negativo en el cerebro. Pero el consumo diario de cafeína afecta evidentemente a nuestro hardware cognitivo, lo que en sí mismo debería dar lugar a más estudios”, subrayó Reichert.
“Los cambios en la morfología del cerebro parecen ser temporales, pero hasta ahora no se han realizado comparaciones sistemáticas entre los bebedores de café y los que habitualmente consumen poca o ninguna cafeína”, concluyó Reichert.
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