En las islas Canarias, reconocida por sus islas volcánicas y por sus playas de arena blanca y negra, se ha detectado específicamente en la isla de La Palma actividades sísmicas que han ido incrementando cada vez más en presencia del volcán de Cumbre Vieja; por lo que, estos hechos han detonado las alarmas a lo largo de la última semana en la isla.
Desde el sábado pasado, La Palma ha tomado registro de 4.530 terremotos; de acuerdo a los últimos datos actualizados que muestra el Instituto Geográfico Nacional (IGN). El volcán de Cumbre Vieja se encontraba en estado durmiente hasta el año 2017, desde entonces se han manifestado registros sísmicos en la zona y que hasta ahora desatan más observaciones.
En su mayoría, los movimientos han pasado inadvertidos para la población; pero durante los últimos días se han producido unos cuantos movimientos sísmicos de mayor intensidad con el epicentro más próximo a la superficie. Según expresan los expertos, lo que está ocurriendo es que el magma se encuentra abriendo paso por la corteza terrestre.
Por esta razón, una de las posibilidades es que la misma podría desembocar en una erupción volcánica de Cumbre Vieja, que a su vez envuelve a varios conos y cráteres que conforman la zona. La comunidad de Canarias, un archipiélago de origen volcánico perteneciente a España, presenta una historia geológica de erupciones en todas las islas que posee.
Un enjambre sísmico rodea el volcán de Cumbre Vieja
En el año 2011, fue la última vez que tuvo lugar un evento importante; cuando una erupción submarina se produjo en la cercana isla de Hierro. No obstante, en la isla de La Palma uno de los conos pertenecientes al volcán de Cumbre Vieja, llamado Teneguía expulsó durante 3 semanas lava en el año 1971.
Con una altura de 439 metros este cono manifestó temblores casi una semana antes de la erupción y desde entonces se considera la más corta de las históricas de Canarias. Luego de esto, la formación volcánica se ha encontrado durmiendo hasta hace cuatro años; cuando se lograron detectar actividades sísmicas y actualmente, se registran más de estas en la Cumbre Vieja.
Cuando en un período relativamente corto de tiempo, suceden un conjunto de eventos sísmicos en un área determinada, ocurre lo que se denomina un enjambre sísmico. La concentración de un gran número de movimientos sísmicos en el tiempo y espacio caracteriza a este concepto, usualmente se presentan antes de una erupción volcánica.
En un período de cinco días, los acontecimientos de la isla de La Palma superan la cantidad de 4.000 terremotos; su inicio se produjo en la zona sur de la isla durante el sábado 11 de septiembre en horas de la madrugada. Hasta el día de hoy, se registraron 50 terremotos a poca profundidad, entre 1 y 5 kilómetros.
De acuerdo a la información brindada por el Instituto Geográfico Nacional (IGN), la actividad sísmica continúa migrando de forma ligera hacia el noroeste, con profundidades que rondan los 8 kilómetros. Además, una medida de 10 centímetros de deformación máxima acumulada es alcanzada hasta los momentos.
Actividades sísmicas de la isla
De los 4.530 terremotos detectados; solo se han localizado un total de 1.023 terremotos en la zona de actividad sísmica y la energía acumulada también presenta un aumento que alcanza los 280 mil millones Julios.
La intrusión magmática es el origen del enjambre sísmico que actualmente presenta La Palma; por lo que, el magma que habita en el interior de la superficie terrestre se moviliza para así poder penetrar la corteza terrestre consolidada; dejando a su vez signos en el exterior.
El área sur de la isla de La Palma que padece de este evento sísmico, se encuentra consiguiendo una altura que ronda los 10 cm; específicamente en la zona cercana a la actividad sísmica y con una distribución compatible con un centro de presión en esa área.
La Red Geodésica Canaria, monitoreada por el Instituto Volcanológico de Canarias (INVOLCAN), calcula que el interior de Cumbre Vieja; donde se ubican la mayor parte de los movimientos sísmicos del enjambre, se inyecta una cantidad de magma de al menos 11 millones de metros cúbicos.
Suben de color en el semáforo volcánico
Los expertos a cargo del estudio constante de estas actividades sísmicas, concuerdan en que un enjambre sísmico en una zona volcánica puede llegar a producir una erupción; pese a que no sea lo más probable. Lo único que se conoce hasta ahora es que en la mayoría de los casos los enjambres sísmicos no acaban con una erupción volcánica.
Se desconoce el resultado que desencadenarán estos eventos. Podrían continuar los sismos durante días, semanas o incluso meses, podrían detenerse y en otra instancia posible, en el caso de que el magma logre desembocar al exterior de la corteza, podría presentarse una erupción volcánica.
Finalmente, este martes las autoridades de la isla pasaron a dar la alerta de color amarillo, el primer nivel de alerta de los tres que conforman el semáforo volcánico. Este color incluye estar atentos a los comunicados oficiales y un plan de emergencia familiar aun cuando las actividades continúen con normalidad.
Adicionalmente, se le pide a la población que estén atentos; a aquellos vecinos de los cuatro municipios afectados, como lo son Fuencaliente, Los Llanos de Aridane, El Paso y Mazo.