Con los avances en el campo de la biotecnología pueden ocurrir cosas increíbles. Pero, por ejemplo, ¿esta ciencia puede crear manzanas con sabor a peras? Por otro lado, existen interrogantes, tales como conocer en qué punto se encuentra la terapia génica.
¿La biotecnología puede llegar a convertir a un humano en mutante?
La biotecnología se conoce como la ciencia que se encarga del estudio del uso de organismos vivos, como hongos, bacterias y virus; para producir o mejorar beneficios para las vidas de las personas. Esta ciencia es multidisciplinaria y llega hasta muchas áreas.
El biotecnólogo Darío García, explica acerca de las nuevas maneras de aplicar la biotecnología, sobre sus retos y sus límites.
La biotecnología y el microbiota
El especialista señaló la relación que existe entre la biotecnología y las heces humanas. Destacó la importancia del microbiota que poseen todos los seres humanos, la cual es necesaria para la vida de las personas.
Y como un ejemplo de los usos que se le está dando ahora mismo al microbiota, habló de un reciente caso en el cual se llevó a cabo un trasplante de heces de una persona sana a un paciente con una infección grave en los intestinos.
García dijo que en un futuro muy próximo se acabará desarrollando nuevas terapias relacionadas con los trasplantes de heces y el microbiota.
Peras con sabor a manzanas
Por otro lado, el biotecnólogo, dijo que se han realizado estudios para lograr intercambiar los sabores en las frutas, ya esto es posible en la actualidad.
Para lograr el intercambio entre los sabores, se localizó el gen que aporta el sabor a la fruta. Una vez ubicado este gen en la pera o en la manzana, se procede a cortarlo y colocarlo en el otro lugar. Afirmó que se logra de esta forma tan sencilla.
También señaló que ahora mismo se está buscando hacer algo parecido con el tomate, primero localizando ese gen que le aporta el sabor, para que con el uso de la ingeniería genética se pueda introducir en los tomates actuales.
Avances en el campo de la terapia génica
El científico comentó que, en las últimas dos décadas se han realizado muchos avances en el campo de la terapia génica. Afirmó que este tipo de terapia está llegando a ser una técnica bastante segura y está muy avanzada. Señaló que es posible que en algunos años represente una solución para la mayoría de las personas que sufren de enfermedades raras monogénica. Cuando se trata de la presencia de uno o de dos genes que estén causando problemas, lo más sencillo sería cortarlos y cambiarlos, aseguró García.
Así mismo, el experto dijo que otro ejemplo de la práctica de la terapia génica sería en el momento de utilizar la proteína verde fluorescente dentro de los estudios para la investigación de un tipo específico de neurona; el cual llega a teñirse con esa proteína llamativa para lograr identificarla.
Al respecto dijo que, si alguien busca que su mascota sea verde fluorescente, ahora si es posible, pero por ética nadie cree que eso sea correcto. García continuó diciendo que los superpoderes quedarían al margen de lo que la ciencia puede llegar a hacer. Sin embargo, hay algunas terapias génicas que se encontrarían dentro de lo aceptable como incrementar la masa de los músculos o reparar daños en la visión de las personas.
¿Hacia dónde va la biotecnologia y cuáles son sus límites?
Según García, puede ser probable que lo que se dice ahora mismo, ya dentro de 10 años haya quedado muy atrás y obsoleto. Así, la terapia génica puede que sea necesaria para curar muchas enfermedades.
Por otro lado, en el área de las células madre; en estos momentos la ciencia se encuentra en el punto de que en pocos años se pueda obtener órganos completos creados por medio de las células madre provenientes del mismo paciente enfermo; y así se lograría evitar el rechazo a los trasplantes, aseguró García.
Sin embargo, en el momento de marcar límites, García aclaró, que el mayor límite que se presenta es el conocer cómo utilizar la biotecnología, qué técnica pueden ser usadas para desarrollar lo que se quiere con tales genes.
En este sentido, García señaló que es muy difícil cuidar que todo esté bien cuando se está tratando con el ADN de un cuerpo. Y finalmente, dijo que además se encuentran los límites morales y éticos.