De ser cierta esta hipótesis, Mimas nos presentaría una nueva clasificación de mundo oceánico muy sigiloso que no da indicios de su existencia, principalmente porque su superficie se camufla con el resto de la superficie sólida.
El satélite Mimas es la luna más interior y pequeña de las nueve más importantes que tiene Saturno en su órbita. Esta luna cuenta con apenas 396 kilómetros de diámetro y toda su superficie esta llena de cráteres de diversos tamaños y profundidades. Hay un cráter en especial que destaca sobre los otros, siendo la característica más resaltante de la superficie de Mimas.
La marca distintiva del satélite es el cráter Herschel, que recibe ese nombre en honor a William Herschel, astrónomo germano-británico que descubrió Mimas en 1789. Este masivo cráter ubicado en la región central del satélite mide 139 km de diámetro; lo que brinda a Mimas un gran parecido a la ‘Estrella de la muerte’ de la película ‘Star Wars‘.
Un océano interno en Mimas
Se está evaluando a fondo la posible existencia de un océano subterráneo en Mimas. Hay más satélites de Saturno y Júpiter con esta cualidad de albergar océanos de agua internos. En el caso de la pequeña luna con aspecto de la ‘Estrella de la muerte’, hay también los indicios de que oculte agua en su interior.
Según las investigadoras AlyssaRhoden y Adeene Denton, del Instituto de Investigación del Suroeste, en Boulder, Colorado, y de la Universidad de Brown,respectivamente;“La luna Mimas produce suficiente calor como para mantener un gran océano subterráneo de agua líquida”. Luego de establecer tal hallazgo, empezaron a surgir las teorías de cómo pudo haber evolucionado el interior de Mimas a partir estudios en su superficie.
Recientemente fue publicado este estudio en ‘Geophysical Research Letters’, con resultados prometedores. Mediante simulaciones del gran cráter Herschel, se pudo determinar que la estructura de la cuenca y la ausencia de material tectónico en el satélite; coinciden con una capa de hielo cada vez más fina y un océano muy joven geológicamente, que está contenido bajo dicha capa.
Mimas y su reveladora oscilación
Bajo la explicación de Alyssa Rhoden (especialista en el estudio de satélites helados con océanos). “cráter Herschelde la NASA a Saturno en las últimas horas ha notificado que la nave espacial captó una oscilación peculiar respecto a la rotación de Mimas, un hecho que frecuentemente indica la capacidad de un cuerpo geológicamente activo, que alberga un océano subterráneo”.
Rhoden continua con su explicación: “Al principio, Mimas no parecía un buen candidato para tales formaciones, ya que consta de una gélida superficie cubierta de cráteres. Pero de tener realmente Mimas un océano, significaría la aparición de una nueva clasificación de pequeños mundos oceánicos ‘sigilosos’, totalmente ocultos bajo una superficie que los resguarda”.
Modelando la formación de la cuenca de impacto del cráter Herschel, Rhoden encontró que; “la capa de hielo del satélite, que actualmente no pasa de los 30 km de grosor, debió tener al menos 55 km al momento en que fue impactado por el meteorito”.
“Así tenemos la certeza de que un océano subterráneo se ha estado calentando y expandiendo, a expensas del hielo, desde el momento en que se originó la cuenca. De paso, los científicos involucrados sólo pudieron plasmar la forma de la cuenca a partir de la implementación de un océano interno en sus modelos”.
Anotaciones finales del reciente estudio
Para las últimas anotaciones, Adeene Denton, investigadora principal del estudio, explica que “la formación del cráter Herschel no pudo ser posible en una capa de hielo del grosor actual, sin que el impacto halla eliminado completamente la capa de hielo donde Mimas fue golpeada”.
“De esta manera se hace más lógico que Mimas tenga actualmente un océano interno, puesto que la capa de hielo ha disminuido su grosor desde la aparición de Herschel. Con esta teoría se puede explicar el porqué Mimas no presenta fracturas importantes que debieron haberse producido con un impacto tan fuerte como el que sufrío”.
“Si en realidad Mimas es un mundo oceánico emergente, esto representa grandes complicaciones para la formación, evolución y habitabilidad en todas las lunas medianas de Saturno”, concluyó la investigadora Adeene Denton.
Por otro lado, Alyssa Rhoden opina que si en verdad existe tal océano bajo la capa superficial de Mimas; “la ciencia actual enfrentará un nuevo desafío para reconciliar las características geológicas y orbitales del satélite en relación de como se estudia la evolución orbital térmica de este tipo de lunas. Lo que significa que Mimas pude servir como uno de los primeros referentes en el estudio de los satélites con características similares”.
“Con Mimas como punto de partida podríamos entender mejor el comportamiento tanto de las lunas medianas como de los anillos de Saturno. Además, podría servirnos como punto de inicio en la búsqueda de comprensión sobre lunas oceánicas potencialmente habitables, con un especial interés en las de Urano”. Por ahora, Mimas sigue siendo una buena fuente de compresión en este sentido, así que las investigaciones continuarán.