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De acuerdo con un análisis realizado por la Organización de las Naciones Unidas (ONU), en América Latina solamente se recicla el 3 % de los residuos de los equipos electrónicos.
Y en Chile solamente se aprovecha el 5 % de los desechos de los equipos electrónicos
Para Santiago Geywitz, especialista y experto académico de la Universidad Técnica Federico Santa María en Chile; “A pesar de que existe una ley nacional, todavía no están claros los porcentajes y las políticas de reciclaje”.
Además, Geywitz piensa que, aunque los números sobre el reciclaje de residuos de equipos electrónicos en Chile son solo de un 5 %; debería haber una profunda preocupación, ya que de acuerdo con la ONU; Costa Rica y Chile son los dos países de Latinoamérica que cuentan con el mejor manejo sobre el reciclaje apropiado de estos desechos.
En el resto de la región americana, el porcentaje de los desechos de equipos electrónicos que no es eliminado de forma correcta, solamente alcanza al 3 %.
Si a la bastante corta vida útil de muchos de los equipos y dispositivos que utilizan las personas como tablet, smartphones, computadores, impresoras y demás; también se le suma que la sociedad actual se encuentra sumergida en la economía lineal (comprar, utilizar, botar). Entonces, los resultados deben ser los que se observan hoy en día, toneladas de desechos electrónicos regados por todas partes.
En la actualidad, en Chile solamente existen 8 compañías dedicadas a la gestión de residuos electrónicos. De las cuales, solo una lleva a cabo el tratamiento completo, llegando hasta la fase de la fundición de metales; con lo que logra producir lingotes de cobre y aluminio. Lo que demuestra que como sociedad enfrentan un gran desafío en materia de colaboración y coordinación entre los involucrados en la gestión de los Residuos de Aparatos Eléctricos y Electrónicos (RAEE).
La ONU asegura que los desechos de equipos electrónicos aumentaron en 49 % en el lapso entre 2010 y 2019
De acuerdo con un análisis hecho por el “Programa Ciclos Sostenibles”, patrocinado por la U. de la ONU y el Unitar (Instituto de Naciones Unidas para la Formación y la Investigación); a pesar de que el volumen de este tipo de desechos aumentó en un 49 % en Latinoamérica, solo un 3 % se recoge por medio de conductos formales y son tratados de manera respetuosa con el ambiente.
Para Santiago Geywitz Bernal, quien es jefe de la Carrera de Ingeniería en Fabricación y Diseño Industrial, y coordinador de Investigaciones, Innovación y Emprendimiento de la USM. A pesar de que su país cuenta con una ley para el manejo de este tipo de desechos; todavía no están muy claras las políticas y los porcentajes de reciclaje.
Y mucho menos la forma de tratar el asunto de manera global. Por lo que Geywitz considera que el procesamiento post-consumo depende en gran medida de iniciativas muy puntuales, que no cubren esta problemática de forma completa.
El peligro que representa el porcentaje de mercurio, plomo y cadmio que queda a la deriva
Los mayores peligros al no ejecutar el reciclaje de manera adecuada de los desechos de equipos electrónicos; consiste en que este tipo de residuos contienen un porcentaje importante de mercurio, plomo, cadmio y otros componentes tóxicos. También de plásticos, vidrios, materiales metálicos, entre otros.
Geywitz advirtió que, posiblemente la mayor fuente de riesgo se encuentre en las baterías y sus componentes, que de no ser tratados de manera apropiada; pueden generar un grave daño al ambiente.
Para el docente, la falta de información o desinformación existente acerca de materialidades y composiciones de estos dispositivos; provoca la urgencia de políticas que traten desde el EcoDiseño de estos aparatos, hasta una clara información acerca de sus materiales, uso, reparabiliad y reuso.
El catedrático recomienda abordar el asunto con el uso de Ecoetiquetas efectivas, que ya se proyectan en otras regiones del mundo como en Europa.
En la actualidad, la European Commission pondrá en ejecución el “Pasaporte Digital de Producto”; el cual servirá como una forma de inventario de todos los materiales, materias primas, componentes usados en un producto, además de la información sobre su ubicación. Esta recopilación de datos busca elevar las posibilidades de que los productos y equipos sean reutilizados varias veces; y que también sean reciclados de forma correcta al final de su vida útil.