El plástico es un material que engloba una gran variedad de aplicaciones; su bajo costo productivo lo hizo ver muy atractivo en la industria. Sin embargo, los productos generados por este compuesto resultan ser grandes contribuidores de la contaminación ambiental. La producción de plástico es una alarma para personas que buscan promover actividades conservacionistas del planeta.
Los grandes impactos negativos de este material son temas tratados por científicos y ecologistas de todo el mundo, resaltan la gravedad de su uso y las repercusiones que esta tendrá sobre los ecosistemas. Lo complicado que resulta la eliminación del plástico sin afectar al medioambiente; da como resultado costos superiores a los que estipulan solo con el plástico virgen.
Basado en esto, el Fondo Mundial para la Naturaleza publicó recientemente un informe donde se estima que el ciclo de vida del plástico que se ha producido a lo largo del año 2019, tuvo un costo en la sociedad de 3,7 billones de dólares; destacando que la cantidad es mayor a la del producto interno bruto (PBI) de algunos países como la India, Francia y Reino Unido.
Para entender un poco más de este golpe económico, se puede aclarar que los costos no solo deben representar la producción de plástico sino también los generados durante su tiempo de vida. Una tonelada de este polímero cuesta alrededor de 1.000 dólares producirlo; aunque las cifras no quedan allí, continúan con aquellas que se dan durante el manejo del producto.
No solo la etapa de producción de plástico genera un costo
Uno de los primeros datos resaltantes del informe, es que las emisiones de los gases de efecto invernadero cuando se produce el plástico representan un costo que se eleva a 171.000 millones de dólares; en tanto que la manipulación de los residuos plásticos, integrado por los procesos de separación, recolección, hasta finalmente llegar a los de desecho y reciclaje, son casi unos 38.000 millones.
Ahora bien, se debe enfatizar que el más grande impacto económico del plástico lo ocasiona la degradación del medioambiente, sobre todo los generados en los ecosistemas marinos. En el camino a la desintegración del material, este logra descomponerse en fragmentos más pequeños de materia y fungen como contaminantes de los espacios naturales.
Este sistema es muy lento, algunos plásticos pueden llegar a tardar más de 100 años en descomponerse por lo que no es nada sencillo la eliminación de estos productos naturalmente y sin dañar más al planeta. El proceso puede continuar con la transferencia de energía alimenticia a través de la cadena trófica; y finalmente pasar a formar parte del consumo de los seres humanos.
Los expertos señalan que, esta problemática mundial posee un alto nivel de impacto en los servicios ecosistémicos brindados por los ecosistemas marino; que son asociados con las funciones de regulación y de hábitat del mismo. El control de la contaminación o la estabilización de la costa son algunos de estos importantes servicios.
Los beneficios obtenidos por estos ecosistemas contribuyen tanto en ámbitos sociales, económicos y de salud como en la calidad de vida ofrecida por el planeta. El deterioro y la subsecuente disminución de estos, reflejan un costo de aproximadamente 3,1 billones de dólares y un punto realmente crítico para la humanidad.
La contaminación ambiental es difícil de cuantificar
Marco Lambertini, actual director general del Fondo Mundial para la Naturaleza indicó que la evaluación realizada, es la primera que muestra claramente algunos de los costes que no se contabilizan por la acción contaminante que producen los plásticos en la sociedad; un excesivo peso para poder sostenerlo, ya sea para las personas o para el medioambiente.
La publicación también apunta que los resultados mostrados son una ínfima parte de lo que representan realmente. Los impactos que se conocen y aquellos potenciales en la salud del ser humano, al igual los que se generan en los ecosistemas terrestres; todavía no se han cuantificado o resultan hasta ahora difíciles de calcular.
Advierten que, si no se toman las medidas adecuadas para la disminución de la contaminación proporcionada por los productos plásticos, la sociedad cargará con un costo de hasta 7,1 billones de dólares para el año 2040; superando así a la cifra del producto interno bruto (PBI) de la segunda economía más grande a nivel mundial, como lo es China.
Los plásticos han logrado abarcar espacios vitales para los seres vivos, la productividad y uso del material resultan en grandes amenazas de contaminación en todas las regiones del planeta, especialmente a los mares; perjudicando la salud y supervivencia de las especies que habitan los ecosistemas acuáticos.
La contaminación no es un juego, representa seriamente la destrucción progresiva de los ambientes naturales y en consecuencia de todos los seres vivos que habitan o dependen de ellos. La conservación del planeta queda a manos de la humanidad, así como la reparación de los daños causados.