Recientemente, una nueva investigación avalada por la revista “AGU Geochemistry Geophysics, Geosystems”; comunicó que una clase de helio que se distingue por ser un diferente y extraño gas, fue originado luego del Big Bang. El cual se encuentra filtrado en el núcleo de nuestro planeta.
Las materias halladas abren paso para darle espacio a los argumentos basados en que el Planeta Tierra se formó desde el origen de una nebulosa solar.
Un extraño gas que se formó luego del Big Bang
Por cuestiones del tiempo transcurrido, los expertos que llevan a cabo el estudio creen y esperan que por cada 365 días aproximadamente 4 libras del extraño isótopo de gas de helio, el helio-3; huyen de la profundidad de la Tierra. Por otro lado, se estima que el extraño gas helio-3 se formó luego del Big Bang, hace más de 12.000 millones de años.
En vista de que el extraño gas se originó luego de que ocurriera la explosión del inicio del mismo universo; el escape de filtración ayuda como muestra para validar que nuestro planeta se creó en lo más profundo de una nebulosa solar. La cuál está compuesta inicialmente por un gas hidrógeno, con diminutas raciones de los demás componentes que se encuentran actualmente en el sistema solar, asegura Spiegato. Por lo tanto, se elimina la opción que de que no se creó mientras ocurría la fase menguante o en la periferia.
El establecimiento de todo el sistema solar, se ha convertido en un verdadero misterio durante años, y constantemente se está en la búsqueda de cualquier clase de respuesta congruente; primordialmente en el campo de investigación astronómica.
Respecto a las investigaciones y los resultados recolectados de El Universal; el proyecto de investigación que principalmente se basa en la teoría sobre cuando un planeta va en crecimiento, lleva consigo materia de su alrededor, lo que demuestra su composición con el mismo entorno en donde se formó.
Ahora se conoce que el helio-3 se escapa desde el núcleo de la Tierra
En esa serie de investigaciones, la filtración de helio-3 ya se ha evaluado desde la superficie del planeta Tierra en pequeña medida. No obstante, los expertos no contaban con del conocimiento del contenido que se pudiera escapar desde la profundidad del mismo núcleo. Directamente al tamaño de dorsales oceánicas donde fluyen entre sí las placas tectónicas. Las que se distinguen de los mantos, que son capas intermediarias.
EL geofísico de la Universidad de Nuevo México e investigador principal, Peter Olson mencionó a través de una notificación que anualmente se fugan alrededor de dos mil gr de helio-3 del planeta Tierra. Esta cantidad es lo suficientemente grande como para ocupar una esfera del tamaño de una mesa particular.
Este fenómeno natural es sorprendente y admirable, pero también una huella que nos indica la posible historia de la Tierra; y que aún exista esta clase de Isótopo en el núcleo de la Tierra en una notable cantidad.
El extraño gas se intercambia entre el manto y el núcleo de la Tierra
Para poder alcanzar esta clase de resultados, el equipo de expertos obtuvo una participación en el estudio, donde crearon un patrón de helio a lo largo de la historia de la Tierra. Ya era de carácter necesario ubicar las porciones del extraño gas intercambiándose entre el manto y el núcleo del planeta.
En realidad, se consideraron dos fases a examinar: La composición y creación adelantada, en el momento que la Tierra acumulaba helio, y luego de la formación lunática, donde posteriormente se desapareció el helio.
Con los ensayos que se pudieron proporcionar a través de la ciencia; el patrón da soporte para el tercio del tamaño total de la Tierra, que se encontró de golpe con el planeta azul desde el inicio de la historia, esto hace alrededor de 4 millones de años. En conjunto también se cree que este choque condensó la corteza terrestre, lo cual ocasionó que el helio se fugara como consecuencia. Y continuamente ha sucedido, el gas continuó escapándose.
De cualquier forma, el equipo de expertos pudo comprobar una gran porción entre un pentagrama de helio-3 en el núcleo de la Tierra y 10 teragramos.
Oslon comentó que dicha cantidad sugiere la creación de la Tierra estando adentro de la nebulosa solar, que daría lugar a grandes concentraciones del gas; que habría admitido su almacenamiento en el interior de nuestro planeta.
Precisamente en estos momentos, el grupo de investigación está trabajando arduamente con la finalidad de conseguir más información que respalde lo hallado. Entre estos podrían ser diferentes gases de la nebulosa, tomando en cuenta el hidrógeno que también se filtra de la tierra como el extraño gas helio-3.