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Este martes se definieron los últimos dos partidos de la ronda de octavos de final de la Eurocopa 2020. Con lo cual, se completaron los cruces para la instancia de cuartos de final. Por un lado, en el compromiso que se robó todas las miradas, Inglaterra, luego de 46 años y muchas eliminaciones dolorosas ante su llamada bestia negra, volvió a derrotar al combinado alemán, en esta ocasión por 2-0, lanzando de manera firme su candidatura a quedarse con el evento.
Mientras tanto, la sorprendente Ucrania de Andriy Shevchenko, dio el golpe a segunda hora. Dejando en el camino a la hasta entonces invicta selección sueca por 2-1. Marcando el gol del triunfo cuando la prórroga expiraba y parecía inminente la definición desde el punto penal. Instalándose por primera vez en su historia en la ronda de 8 del torneo.
El Wembley Stadium, fue el recinto que albergó un nuevo capítulo de la rivalidad entre ingleses y alemanes. Con un sólido bloque y en algunos casos especulando demasiado, el entrenador de ‘Los tres leones’, Gareth Southgate, logró su cometido, limitando el accionar de los de Joachim Low, que también planteó un juego pragmático, con mucha precaución, priorizando el cerrojo defensivo para a partir de allí, gestar los ataques.
Inglaterra va en busca de la 1ª Eurocopa de su historia
En la primera parte, ambos porteros protagonizaron intervenciones notables para evitar la caída de sus arcos. Tanto Jordan Pickford como Manuel Neuer, respondieron a las exigencias a las que fueron empleados.
En el arranque del complemento, el arquero del Everton continuó con su sobresaliente labor, logrando desviar un fuerte disparo de Kai Havertz en la entrada del área. Con el paso de los minutos, el seleccionado inglés con su toque seguro y pausado, iba ganando metros en el campo.
A falta de 15’ para el cierre, Raheem Sterling destrabó el partido. El extremo del Manchester City, arrancó una jugada que el mismo finalizó, partiendo en tres cuartos de cancha desde el medio hacia la izquierda.
Acercándose al área, el nacido en Jamaica combinó con Harry Kane, que a su vez, la jugó con el recién ingresado Jack Grealish. El futbolista del Aston Villa, hizo lo propio tocándola hacia donde se incorporaba Luke Shaw por el carril izquierdo. Mandando un centro rasó de primera que tuvo a Sterling como rematador, abriendo la lata de un partido muy cerrado.
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Tras esto, el propio Sterling fue anticipado por Toni Kroos, en el centro de campo, quedando mal parado el conjunto inglés. Thomas Muller recibió la habilitación de Havertz que lo dejó en una carrera mano a mano ante Pickford, pero el remate del jugador del Bayern Múnich, salió apenas desviado del palo derecho del cancerbero, perdiéndose una inmejorable oportunidad de establecer el empate.
Tras esto, Grealish armó una acción por izquierda y colocó un gran centro medido a la cabeza de Kane, para que el atacante del Tottenham, se estrenara en la competencia y pusiera el 2-0 definitivo.
Desde aquel polémico triunfo inglés en la final del Mundial 1966 desarrollado en suelo británico, con el ‘gol fantasma’ que les dio su primera y única coronación universal a los creadores del fútbol, estos no sabían lo que era derrotar al cuadro ‘Teutón’ en un gran evento.
Ahora, Inglaterra enfrentará a una de las revelaciones de la justa, el elenco ucraniano, por un lugar en semis. Este partido será el próximo sábado, en el estadio Olímpico de Roma.