Criptomonedas como el Bitcoin y el Ethereum suben durante un tiempo y luego suben más, y muchas otras monedas digitales populares también lo están haciendo. Los operadores experimentados llevan años especulando con las criptomonedas, pero ¿qué pasa si eres nuevo en el mercado y quieres generar ingresos pasivos criptomonedas?
No inviertas más de lo que puedas permitirte perder
Es importante evitar poner el dinero que necesitas en activos especulativos. Si no puedes permitirte perderlo -todo- no puedes permitirte ponerlo en activos de riesgo como las criptomonedas, o en otros activos basados en el mercado como las acciones o los ETFs, para el caso.
Ya sea el pago inicial de una casa o una próxima compra importante, el dinero que necesitas en los próximos años debe guardarse en cuentas seguras para que esté ahí cuando lo necesites. Y si lo que buscas es una rentabilidad absolutamente segura, tu mejor opción es pagar la deuda. Tienes garantizado ganar (o ahorrar) cualquier tipo de interés que estés pagando por la deuda. Ahí no puedes perder.
Por último, no pases por alto la seguridad de cualquier bolsa o corredor que utilices. Puede que los activos sean tuyos legalmente, pero alguien tiene que asegurarlos, y su seguridad debe ser estricta. Si creen que su criptodivisa no está bien protegida, algunos operadores optan por invertir en una cartera de criptodivisas para mantener sus monedas fuera de línea, de modo que sean inaccesibles para los hackers u otras personas.
Cuidado con la volatilidad
Los precios de las criptomonedas son lo más volátil que puede haber en un activo. Pueden caer rápidamente en cuestión de segundos por nada más que un rumor que acaba resultando infundado. Eso puede ser estupendo para los inversores sofisticados que pueden ejecutar operaciones rápidamente o que tienen un sólido conocimiento de los fundamentos del mercado, de la tendencia del mercado y de hacia dónde podría ir. Para los nuevos inversores sin estas habilidades -o los potentes algoritmos que dirigen estas operaciones- es un campo de minas.
La volatilidad es un juego para los poderosos operadores de Wall Street, cada uno de los cuales trata de superar a otros inversores con mucho dinero. Un nuevo inversor puede ser fácilmente aplastado por la volatilidad.
Esto se debe a que la volatilidad hace tambalearse a los operadores, especialmente a los principiantes, que se asustan. Mientras tanto, otros operadores pueden intervenir y comprar a bajo precio. En resumen, la volatilidad puede ayudar a los operadores sofisticados a «comprar barato y vender caro», mientras que los inversores inexpertos «compran caro y venden barato».