Volar en un túnel del viento no es un plan cualquiera. Sentir la experiencia de volar es un sueño para gran cantidad de personas, y hacerlo realidad quizás suene a imposible, pero no lo es. Si además el plan es volar en el mayor túnel del viento de Europa, hay un salto de nivel.
La buena noticia es que dicho túnel se encuentra en España, concretamente en la localidad madrileña de Leganés. Se trata de HiFly Madrid, ubicado en el centro comercial Sambil Outlet Madrid.
¿Cómo es volar en HiFly Madrid?
Volar en el túnel del viento de HiFly Madrid es sin duda una experiencia única. Dentro de la cámara, 6 potentes ventiladores generan una corriente de aire que puede alcanzar la velocidad de un huracán real (270 kilómetros por hora), aunque la velocidad programada depende de las características del volador que se encuentra en el túnel del viento y de sus posiciones.
La velocidad programada dependerá tanto del peso del volador como de la posición que este mantenga dentro de la cámara de aire. De esta manera, para los voladores con un peso más ligero se programa una velocidad más baja, y esta aumenta cuando se trata de una persona de mayor peso. Igualmente, la velocidad es menor si se vuela de espaldas, sentado y boca abajo, mientras que en las posiciones más básicas, la velocidad es más alta. La media está en 180 kilómetros por hora.
Una experiencia sin igual y completamente segura
Volar es una experiencia emocionante, pura adrenalina. Sin embargo, para que nada arruine la actividad es importante llevarla a cabo con todas las medidas de seguridad necesarias. Y este es un aspecto en el que en HiFly Madrid no descuida un solo detalle.
Por ello, antes de comenzar el vuelo, los clientes reciben una sesión de formación que dura 15 minutos aproximadamente. En esta charla se les instruye sobre cómo deben controlar su cuerpo, qué está permitido y qué se prohíbe hacer en el túnel del viento, y todo lo que tienen que saber para volar en la cámara de aire.
Otra medida de seguridad que han tomado en HiFly Madrid consiste en que los voladores con menos experiencia vuelan siempre en compañía de su instructor, por lo que no tienen que temer a perder el control. Tan solo los voladores más experimentados pueden volar en grupos de hasta 8 personas.
Por otro lado, los usuarios del túnel del viento entran en la cámara con una equipación adecuada, formada por un traje, un casco y unas gafas (se recomienda que vayan con zapatillas deportivas).
Cabe destacar también que aunque volar en este túnel del viento en Madrid es una actividad indicada para todo tipo de personas, en algunos casos el vuelo está prohibido, también por razones de seguridad. En concreto, no pueden volar en HiFly Madrid los niños menores de 4 años de edad, las mujeres embarazadas ni las personas con un peso de más de 110 kilos.
Tampoco está permitido volar en caso de padecer problemas de corazón o de circulación sanguínea; tener problemas de espalda, discos intervertebrales o cualquier otro tipo de lesión; o estar bajo los efectos del alcohol u otras sustancias prohibidas.
Y después del vuelo, ¡la diversión sigue!
Una vez que termina el vuelo en HiFly Madrid, el cliente puede llevarse un recuerdo en forma de fotografía o vídeo, ya que la actividad es inmortalizada. En este caso, recibirá el material en formato digital en su correo electrónico.
Tras esto, los clientes que lo deseen pueden tomar algo en el restaurante que encontrarán en el propio establecimiento, donde pueden seguir la diversión comentando las anécdotas del vuelo junto a sus acompañantes. Además, en el centro comercial Sambil Outlet Madrid hay otras muchas opciones para seguir pasando una jornada inolvidable después de abandonar HiFly Madrid.
Esto es lo que espera a los voladores experimentados en HiFly Madrid
En HiFly Madrid, tanto las personas que se están iniciando en el vuelo como aquellas que tienen gran experiencia pueden pasar un día perfecto. Los voladores más experimentados o sportflyers tienen a su disposición los productos de Sportflight, de 10 minutos de vuelo o más por usuario. El tiempo de vuelo suele dividirse en entradas de 2 minutos, con un tiempo de descanso de entre 2 y 4 minutos entre ellos.
Gracias a su experiencia, los sportflyers pueden elegir a su entrenador entre los instructores de HiFly Madrid, y tener clases privadas con ellos. Si lo desean, también pueden participar en eventos con ellos, e incluso pueden llevarse a su propio entrenador al túnel del viento.
Y es que volar en un túnel del viento no solo es una actividad de ocio; más allá de esto, también se trata de un deporte oficial, en el cual se puede mejorar hasta alcanzar un nivel profesional. Los voladores pueden comenzar con competiciones pequeñas, seguir con competiciones internacionales e incluso llegar al Campeonato del Mundo.