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Recoleta a pie te propone un circuito para hacer caminando por el barrio más chic y elegante de la capital porteña. Disfruta una tarde recorriendo sus plazas, monumentos, edificios, avenidas elegantes y su famoso cementerio.
Avenida Figueroa Alcorta, Facultad de Derecho y Floraris Genérica
Comenzamos nuestro recorrido de la Recoleta a pie en el puente peatonal Alfredo Roque Vítolo, más conocido por los porteños como el puente de Figueroa Alcorta. El puente nos lleva a la Plaza Federativa de Brasil, donde está el Centro de Exposiciones y Convenciones de la ciudad. Luego de echarle un vistazo, seguimos por la avenida Figueroa Alcorta, que recuerda a un presidente argentino, el que organizó los festejos del Centenario de la revolución de Mayo, en 1910.
El primer edificio que tenemos a la izquierda es la imponente Facultad de Derecho, que pertenece a la Univerdidad de Buenos Aires, fundada en 1821 y completamente gratuita. La educación y la salud son gratuitas en Argentina, incluso para extranjeros.
Continuamos con nuestro recorrido de Recoleta a pie hasta llegar a la Plaza Naciones Unidas, donde se encuentra uno de los más bellos monumentos de la ciudad. Es un monumento metálico y se llama Floralis Genérica. Fue realizado en 2002 por el artista argentino Eduardo Catalano, quien lo donó a la ciudad. Lo más curioso es que está realizada con materiales de aviones, donados por una empresa aeronáutica argentina.
Pasando la hemosa flor, vemos el edificio de la TV Pública, inaugurado en el año 1978 para transmitir el campeonato mundial del futbol 78, realizado en Argentina.
Llegamos a la calle Tagle, que marca el limite con Palermo, más precisamente la zona de Palermo Chico, barrio residencial y de embajadas.
Plaza Uruguay-Biblioteca Nacional-Monumento a Eva Perón
Tomamos la Calle Tagle que separa los barrios y tenemos a la derecha la plaza Chile y la embajada del país. A la izquierda, la plaza República Oriental del Uruguay, donde se levanta un bello monumento en honor a José Gervasio Artigas, héroe máximo del país vecino. Vale la pena acercarse a esta obra de arte realizada en bronce, mármol y granito por José Zorrilla de San Martín, escultor y pintor uruguayo. Era hijo del famoso escritor Juan Zorrilla de San Martín, autor del obelisco de Montevideo y padre de la famosa actriz China Zorrilla.
Cruzamos la avenida Libertador y en la siguiente esquina de la calle Austria, nos detenemos para conocer la Biblioteca Nacional y el Monumento a Eva Perón, uno de los puntos turísticos de la ciudad de Buenos Aires. Este monumento muestra a una Evita diferente. Su autor, Ricardo Gianetti, quiso mostrar una faceta más simple de Eva, más cercana a los pobres y desfavorecidos, a los que ella tanto ayudó.
Eva Perón es, sin dudas, una de las mujeres más influyentes de la historia argentina. Nació en Los Toldos, provincia de Buenos Aires, y vino a la capital para trabajar de actriz. Pero su vida dio un giro al conocer al General Juan Domingo Perón, militar y tres veces Presidente de la Nación. Se casaron y Evita se convirtió en primera dama, desde donde ejerció una gran influencia en la política argentina. Creó el Partido Peronista Femenino, impulsó el voto de las mujeres y creó la Fundación Eva Perón para ayudar a los más desprotegidos. A los 33 años falleció de cáncer de útero.
El monumento se emplazó aquí porque fue el lugar donde murió. Donde hoy está la Biblioteca Nacional estaba el Palacio Unzué, que era la residencia oficial de los presidentes y donde vivió y murió Eva. Luego de su muerte el lugar se convirtió en un santuario en honor a Evita. Por este motivo, cuando un golpe militar derrocó a Perón en 1955, tres años después de la muerte de Eva, los militaron decidieron demoler el edificio para borrar todo trazo de la existencia de ambos. Recién en los años 90 se construye el monumento y la Biblioteca.
Plaza Mitre, Plaza Francia y Museo de Bellas Artes
Segumos caminando por la Avenida Libertador y nos encontramos con la Plaza Mitre y su monumento en honor a Bartolomé Mitre. Fue presidente del país, escritor, periodista y fundador del diario «La Nación». Estamos en la zona denominada «la Isla», un sector de Recoleta con pasajes, escaleras, calles estrechas, monumentos y mansiones que nos hacen sentir por un momento en París. Podemos subir la barranca y recorrerlo, son pocas cuadras pero hermosas y luego volver a la avenida.
Al lado de la Plaza Mitre, se ubica la Plaza Francia y su monumento «De Francia a Argentina». Fue un regalo de la comunidad francesa a la ciudad por motivo del centenario de la Revolución de Mayo, en 1910.
El monumento es obra del francés Émile Peynot, fue realizada en Francia y ensamblada aquí. Representa momentos importantes de las historias de Francia y Argentina. Por ejemplo, la Revolución Francesa, la toma de la Bastilla, la Revolución de mayo, la Primera Junta o el Cruce de los Andes de San Martín.
Frente a la Plaza Francia, el Museo Nacional de Bellas Artes. Es el museo más importante del país y uno de los más importantes de Sudamérica por su colección tan variada y valiosa. Alberga arte precolombino, pinturas, esculturas, grabados y dibujos tanto de artistas extranjeros como argentinos. Se pueden ver obras de Van Gogh, Renoir, Rembrant, Goya, Picasso y los mejores artistas argentinos como Antonio Berni, Spilimbergo, Prilidiano Pueyrredón, Quinquela Martín y mucho más. El acceso es gratuito.
Al lado del Museo ya vemos el puente donde hoy comenzamos nuestro Recoleta a pie. Ahora cruzamos para ir a la Plaza Alvear, el epicentro del barrio Recoleta.
El corazón de Recoleta: la plaza Alvear y el cementerio
Subimos por la Avenida Alvear (continuación curva de la avenida Libertador) y vamos bordeando la plaza Alvear. A la izquierda vemos un monumento en honor a Carlos María Alvear, militar, político y gran amigo de José de San Martín. Fue él quien lo introdujo a San Martín en la sociedad porteña y le presentó a su esposa. Carlos María era el padre de Torcuato de Alvear, el primer intendente que tuvo la ciudad entre 1883 y 1887. Esto ocurrió luego de la federalización de Buenos Aires sancionada en 1880. A partir de esta fecha, la ciudad se convirtió en la capital federal de Argentina.
Llegamos a la plaza Intendente Alvear (que homenajea a Torcuato de Alvear). Aquí veremos el ex convento de los recoletos (hoy un Centro Cultural), la iglesia del Pilar y el famoso cementerio de Recoleta.
Este fue el lugar donde los monjes recoletos se establecieron a principios del siglo XVIII. En el año 1821 fueron expulsados y sus terrenos expropiados. En el antiguo huerto de los religiosos se inauguró el primer cementerio público de Buenos Aires. Hoy es un cementerio muy famoso, que se puede visitar. Es muy valioso no sólo por el gran patrimonio artístico y arquitectónico sino también por las personalidades importantes que allí descansan. Todos los presidentes argentinos, los héroes de la independencia, los escritores famosos, los premios nobel y también mujeres importantes de la historia. De hecho, Eva Perón está enterrada aquí y es la tumba más visitada.
Para visitarlo, se debe pagar una entrada de dos mil pesos argentinos para extranjeros (argentinos gratis). Sólo se puede abonar con tarjeta de crédito o débito, no aceptan efectivo.
Luego de recorrer la plaza y el cementerio, una buena idea: terminar nuestro paseo Recoleta a pie es tomar un café en el emblemático café La Biela. Es un bar notable y uno de los más antiguos de la ciudad. Puedes sacarte una foto con las estatuas de los célebres escritores argentinos Jorge Luis Borges y Adolfo Bioy Casares, asiduos visitantes del café.
¡Espero que nuestros consejos te sirvan para disfrutar Buenos Aires caminando!