El pasado miércoles la Mesa Nacional de la Sequía de España analizó las consecuencias de la histórica falta de agua en el país ibérico. Mientras que los agricultores están reclamando planes urgentes para hacer frente a la crítica situación.
Más ayuda para combatir los efectos de la sequía
El Gobierno de España estará reclamando a la Comisión Europea flexibilidad en la aplicación de la norma de la PAC, debido a las grandes dificultades que están enfrentando los cultivos en el país ibérico por la sequía tan prolongada. España también se encuentra trabajando en un nuevo paquete de ayudas para paliar los efectos del fenómeno en los cultivos agrícolas.
De este modo fue confirmado por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación español a través de un comunicado, como conclusión de la Mesa Nacional de la Sequía que fue celebrada el pasado miércoles para analizar las consecuencias de la histórica falta de agua que enfrenta la nación y que está amenazando a la producción agrícola y ganadera.
En este encuentro también estuvieron presentes las comunidades autónomas, la federación de regantes (Fenacore), las Cooperativas Agro-alimentarias y el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Miteco.
Un paquete de medidas para mitigar el impacto de la sequía
El Gobierno aseguró que ya se encuentra trabajando en la preparación de un nuevo paquete de medidas de apoyo al sector agrario que mitiguen el impacto de la sequía sobre la producción del campo. También se supo que el titular del Ministerio, Luis Planas, remitirá una carta de forma inmediata a la Comisión Europea con la intención de plantear todas aquellas medidas de flexibilización o de carácter excepcional en la aplicación de las normas de la PAC (Política Agraria Común).
Con lo que busca que aprecien las especiales dificultades en las que se encuentran los cultivos del campo español que resultan de la sequía, para que los agricultores y ganaderos no vean en peligro su acceso a las ayudas. De igual manera el Gobierno ha señalado que, el Fondo Español de Garantía Agraria, FEGA, convocará un encuentro con las comunidades autónomas para que se adopten todas las medidas a nivel nacional en este ámbito.
En la reunión, que se prolongó por más de 4 horas, las autoridades españolas se comprometieron en establecer un cauce de comunicación permanente mientras dure esta situación de riesgo que representa la intensa sequía.
El efecto de la sequía en las cuencas nacionales
Durante el encuentro se contó con la participación presencial o telemática de los representantes de todas las comunidades autónomas, también las organizaciones profesionales agrarias ASAJA, COAG y UPA, además de la Conferencia de Cooperativas Agroalimentarias de España y la Federación Nacional de Regantes de España. También se contó con la participación de los representantes de los ministerios de Agricultura y Transición Ecológica.
En la reunión se pusieron en común los informes de precipitaciones y disponibilidades, también se hizo un análisis de la situación general y particularizada en las diferentes comunidades autónomas y se pusieron sobre la mesa una serie de propuestas que deberán ser analizadas próximamente.
Por su parte, la cartera de Agricultura reconoció que la situación de la sequía es grave y generalizada, aunque muestra diferencias importantes en terreno y destaca la grave afección a las cuencas del Guadalquivir, Guadiana y las cuencas interiores de Cataluña.
Cómo enfrentar la emergencia
Durante el encuentro del pasado miércoles, las organizaciones agrarias COAG, ASAJA y UPA le solicitaron al Gobierno central y a las comunidades autónomas que se habiliten medidas urgentes de carácter económico y legislativo para poder paliar el impacto de la sequía tan severa en el sector primario, y sostuvieron que ya no caben más análisis, sino que se debe pasar a la acción inmediata.
Al finalizar la reunión, Pedro Barato, presidente de ASAJA, insistió, tanto como lo hizo al comienzo del encuentro, en que la situación no está para seguir diagnosticando, y lamentó que el ministro Luis Planas no haya asistido a la reunión, ya que se trataba de un problema acuciante.
También ASAJA solicitó un decreto de sequía urgente donde se recojan las medidas económicas, fiscales y también en el ámbito de los seguros agrarios. Por otro lado, además solicitó flexibilidad al momento de aplicar la nueva Política Agrícola Común o PAC, en ámbitos como el cumplimiento de los ecorregímenes. Además de que se demore la entrada en vigencia del cuaderno digital de campo, que está prevista para el próximo mes de septiembre.
Un pacto de Estado
Por su lado, COAG (que es el miembro de la comisión Ejecutiva Andrés Góngora) reclamó, con la misma fuerza, que se pase ya del diagnóstico a la acción con la aprobación de un decreto de sequía además de un pacto de Estado para este fenómeno no se convierta en un arma arrojadiza entre el Gobierno central y las comunidades autónomas.
También la COAG solicitó la constitución de una mesa interministerial con Transición Ecológica, Agricultura y Hacienda para sacar adelante toda clase de medidas, debido a que la situación es bastante grave. De la misma forma que Barato, solicitó flexibilidad tanto para la aplicación de la PAC como al momento de implantar otras normativas en el ámbito de la utilización de los fitosanitarios.
Por otro lado, Ignacio Huertas, quien es secretario de UPA, incidió en la necesidad de colocar presupuesto comunitario, nacional y autonómico sobre la mesa de discusión para la adopción de planes urgentes de respuesta. La UPA ve pertinente que se lleve a cabo un encuentro al más alto nivel, es decir, una reunión donde esté presente el ministro Luis Planas próximamente, lo más pronto posible.
Se respira pesimismo
El encuentro fue celebrado en un momento crucial de las campañas agrícolas y con previsiones en el campo bastante pesimistas acerca de las pérdidas de cosechas por la escasez de agua, debido a que la sequía ya ha causado daños en muchos cultivos, como los granos y amenaza otras producciones como la de hortalizas.
Precisamente este mes de abril está siendo extremadamente seco, han acotado desde la Agencia de Meteorología, AEMET, para matizar que, hasta los momentos, el abril más seco de la serie histórica es el del año 1995, donde se observaron 23 litros por metro cuadrado acumulados en todo ese abril.
Mientras que, en el cómputo global del año hidrológico actual, el valor medio de las precipitaciones acumuladas desde el primero de octubre del año pasada hasta el 11 de abril de 2023, es de 334 litros por metro cuadrado, lo que señala un 21 por ciento menos que el valor normal que corresponde a este periodo, el cual sería 425 litros por metro cuadrado.