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Los defensores de los derechos de la mujer están trabajando en la actualidad para conseguir un mecanismo de financiación del aborto en toda Europa.
Los activistas aseguran que el aumento del apoyo a la extrema derecha en el continente ha hecho que los esfuerzos para financiar el aborto en la Unión Europea sean todavía más urgentes que antes. Están convencidos de que los últimos resultados electorales son una amenaza contra el derecho que tienen las mujeres al aborto.
Definir mecanismos de financiación del aborto ante el avance de la extrema derecha en Europa
A pesar de que los partidos proeuropeos van a mantener la mayoría en el Parlamento europeo, las recientes elecciones dieron paso a un aumento del apoyo a la extrema derecha que las encuestas habían pronosticado desde hace varias semanas atrás.
En el caso de Francia, la ultraderecha Agrupación Nacional, RN, se alzó con la mayoría de los votos, al conseguir el 31 por ciento en los comicios, en un desplante al partido Renacimiento de Emmanuel Macron, que apenas alcanzó un 15 por ciento de los votos para situarse de segundo. También los partidos de extrema derecha lograron un primer lugar en Italia y Austria, además pudieron avanzar en España y Alemania.
Para las defensoras de los derechos de las mujeres europeas pertenecientes a la campaña “Mi voz, mi elección”, los resultados de estas elecciones vienen a reforzar la necesidad de mecanismos de financiación del aborto a nivel de la Unión Europea (UE), un esfuerzo que, según ellas afirman, es en parte una lucha contra los partidos de extrema derecha que han respaldado siempre la restricción del acceso.
Derecho a la financiación del aborto seguro y legal
Con esta campaña las activistas buscan que la Comisión Europea disponga los recursos para que los Estados miembros de la UE financien y puedan brindar el servicio a “cualquier persona en Europa que todavía no tenga acceso a un aborto seguro y legal”. Estas acciones cuentan con el respaldo especial de activistas polacas que han venido trabajando para anular una prohibición casi total del procedimiento en Polonia.
Las activistas polacas de los derechos de la mujer dijeron en una entrevista para Euronews Health que, si no lograban cambiar la ley en su país, donde el partido de derecha Ley y Justicia (PiS) viene apoyando desde hace mucho tiempo las restricciones más duras al aborto, llevarían el tema a la Unión Europea.
El Parlamento de Francia recientemente votó a favor de cambiar la Constitución para hacer de la interrupción del embarazo una “libertad”, como respuesta a la aprobación de una legislación que restringe el acceso a la interrupción del embarazo en varios estados de los Estados Unidos. Por su parte, los líderes del movimiento RN votaron a favor de la medida, otros diputados de derecha y extrema derecha se abstuvieron y algunos otros votaron en contra.
Mientras tanto los defensores de los derechos de la mujer de varios países miembros de la Unión Europea ya han reunido la mitad de las firmas necesarias para la iniciativa ciudadana y están a la espera del inicio de las conversaciones con el Parlamento y la Comisión Europea acerca de este esfuerzo.
Cómo influirán las elecciones en la campaña y sobre la financiación del aborto
La activista Alice Coffin, quien es la coordinadora de la campaña “Mi voz, mi elección” en Francia, que además ha viajado hasta bastiones de la extrema derecha para recoger firmas, dijo que tienen muy buenos motivos para creer que el Parlamento Europeo, todavía es su estado actual, es capaz de votar a favor de la medida, y agregó, no obstante, que sería una lucha política.
Alice Coffin declaró a Euronews Health que, si Francia logró una mayoría en el Senado francés para votar a favor del aborto en la Constitución, entonces ella está completamente segura de que podrán hallar una mayoría en el Parlamento Europeo para votar por la medida.
Aunque Coffin también señaló que ahora será más complicado y aún más por lo que muestran los resultados electorales, que hace que sea todavía más urgente para que se vote una iniciativa de esta forma.
Por su parte, Kika Fumero, quien es la coordinadora en España y especialista en violencia sexual y de género, estuvo de acuerdo con que a medida que los partidos de extrema derecha ganen escaños en Europa, podría ser más difícil conseguir financiación del aborto y para los derechos reproductivos en general.
Derechos sexuales y reproductivos amenazados
Fumero declaró que a medida que la derecha y la ultraderecha vayan ganando poder en las instituciones de la comunidad europea y también a nivel nacional, resultará más difícil legislar o diseñar políticas públicas, como el programa de financiación de las denominadas competencias de apoyo, donde están incluidos los derechos sexuales y reproductivos de los ciudadanos, y más concretamente, el aborto.
La coordinadora española dijo que, en algunos casos, será hasta imposible, dependerá de la cantidad de votos que se necesiten, por lo que los resultados electorales tienen un impacto directo sobre la obtención de recursos y fondos europeos para el desarrollo de políticas públicas en este tema, agregó Fumero.
Mientras que para Alice Coffin los resultados de las elecciones están demostrando que cada vez es más urgente forjar reflexiones, prácticas, comunidades de resistencia y lucha al margen de los partidos políticos tradicionales. Y agregó que los resultados electorales en Francia también refuerzan la importancia de haber inscrito el aborto en la Constitución.
Recientemente los centristas e izquierdistas lograron la aprobación de la resolución no vinculante en el Parlamento Europeo de incluir el acceso al aborto en la Carta de los Derechos Fundamentales
En abril pasado el Parlamento Europeo votó a favor de incluir el acceso al aborto en la Carta de los Derechos Fundamentales de la Unión Europea. Dicha resolución fue aprobada por 336 votos a favor y 163 votos en contra, además contó con el apoyo, sobre todo, de miembros de partidos de centro y de izquierda.
Se trata de un gesto simbólico que se produjo pocas semanas de que Francia consagrara este mismo derecho en su Carta Magna. Emmanuel Macron, presidente de Francia, en esa ocasión declaró que impulsaría la inclusión del aborto en la Carta de Derechos Fundamentales del bloque comunitario.
Sin embargo, representantes de los países con más tradición católica siguen oponiéndose a la interrupción del embarazo. Aunque la votación fue, sobre todo, simbólica por no tratarse de una resolución vinculante. Y es que para que pueda ser incluida en la Carta de Derechos Fundamentales de UE, se requiere que tenga el respaldo de los 27 Estados miembros del bloque comunitario.
Pero el aborto continúa muy restringido en algunos países de gran tradición católica que, seguramente, no votarían a favor de los esfuerzos realizados para reconocer el aborto como un derecho.